La Alianza Centroamericana y Caribeña mejoramiento de cultivos (CACCIA) tiene una visión audaz: construir un futuro más resiliente, equitativo y con mayor seguridad alimentaria para los más de 220 millones de personas que viven en la región.

CACCIA, acrónimo que hace referencia a actuar juntos en coordinación, establece conexiones que abarcan amplios dominios de mejoramiento de cultivos, con el objetivo de cultivar variedades mejoradas de sorgo, judías y batatas. 

Dos nuevos vídeos publicados hoy, 25 de septiembre, muestran la colaboración entre agricultores e investigadores a través del CACCIA con sede en el Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA) de Costa Rica y la Universidad Quisqueya en Haití.

Costa Rica

Haití

José Roberto Camachoinvestigador principal de CACCIA-Costa Rica y director ejecutivo del INTA, dijo que el proyecto tiene un doble objetivo: desarrollar nuevas variedades y crear capacidad científica.

"A través del proyecto, hemos conectado eficazmente nuestro trabajo con iniciativas anteriores, incluidos nuestros programas de mejora genética", dijo Camacho. "Y además, estamos desarrollando las capacidades necesarias para que este trabajo continúe una vez finalizado el propio proyecto".

Gael Pressoirinvestigador principal de CACCIA-Haití y decano de la Facultad de Ciencias Agrícolas y Medioambientales de la Universidad Quisqueya, afirmó que las oportunidades de formación a través de Laboratorio de Innovación para el Mejoramiento de Cultivos están ayudando a los jóvenes científicos a obtener cultivos resistentes con el herramientas, tecnologías y métodos más avanzado disponible.

"Se trata de formar una nueva generación de grandes científicos que sean capaces de abordar los problemas de Haití, pero no sólo de Haití, y que repercutan en toda la región", afirmó Pressoir.

Juan Luis Elizondo Solano, agricultor de toda la vida en Costa Rica y miembro de la Asociación de Productores de Veracruz, afirmó que la cooperación entre cultivadores y científicos es fundamental para mantener la agricultura en la zona, sobre todo teniendo en cuenta que el cambio climático ya ha empezado a disminuir el rendimiento de los cultivos.

"Si hubiéramos seguido sembrando las semillas nativas que teníamos, realmente ya habríamos desaparecido como agricultores", dijo Elizondo Solano. "El cambio climático es una realidad, y no todas las variedades de frijol que tenemos son resistentes a este cambio climático. Luchamos por mejorar cada día con mejores semillas".

Los científicos del CACCIA trabajan en la secuenciación de los genomas de la judía, sorgo, y camote, y realizan ensayos de mejora en colaboración con los agricultores con la esperanza de encontrar nuevas variedades, sobre todo más tolerantes a la sequía y las altas temperaturas, dos condiciones que empeoran en la región a medida que la Tierra se calienta.

CACCIA es uno de cuatro Centros de Innovación establecidos a través de Feed the Future Laboratorio de Innovación para el Mejoramiento de Cultivoscon sede en la Universidad de Cornell. Los otros tres centros se encuentran en Malawi, Senegal y Uganda. Los Centros de Innovación son núcleos regionales de mejoramiento de cultivos que se centran en cultivos esenciales para seguridad alimentaria. Cada uno de ellos está dirigido por Institutos Nacionales de Investigación Agrícola en aquellos países que buscan programas mejoramiento de cultivos sostenibles, climáticamente inteligentes, equitativos y eficaces.