Instituto Nacional de Investigación Agrícola
Universidad de Agricultura y Recursos Naturales de Lilongwe (LUANAR)
Universidad de Agricultura y Recursos Naturales de Lilongwe (LUANAR)
Caupí
Malawi
Mozambique y Tanzania
Universidad de Agricultura y Recursos Naturales de Lilongwe (LUANAR)
Instituto de Investigação Agrária de Moçambique (IIAM)
Instituto de Investigación Agrícola de Tanzania (TARI -ILONGA) y Universidad de Agricultura de Sokoine (SUA)
Caupí, una legumbre que prospera en suelos arenosos, ofrece enormes beneficios nutricionales, socioeconómicos y para la salud del suelo en las regiones áridas de África oriental. Pero la productividad de este cultivo lucha contra la sequía, el calor, la baja fertilidad del suelo y las plagas, lo que ejerce presión sobre seguridad alimentaria en la región.
Con el objetivo de desarrollar líneas de caupí más nutritivas y resistentes, la Universidad de Agricultura y Recursos Naturales de Lilongwe (LUANAR), el Instituto de Investigação Agrária de Moçambique (IIAM) y el Instituto de Investigación Agrícola de Tanzania (TARI-ILONGA) se unen para formar el Centro de Innovación para el mejoramiento de cultivos para África Oriental y Meridional (CICI-ESA). Mediante la caracterización de la diversidad fenotípica y genómica y la realización de estudios de asociación de todo el genoma del germoplasma del caupí, el Centro de Innovación identificará los rasgos preferidos por los agricultores y los consumidores, así como la demanda del mercado.
El Centro de Innovación dará prioridad a la inclusión de los agricultores de Malawi, Mozambique y Tanzania en el proceso de diseño y desarrollo de variedades más productivas y nutritivas, y realizará un análisis exhaustivo para comprender las dinámicas específicas de género y de los jóvenes en la cadena de valor de caupí. La liberación y el uso de variedades estables de alto rendimiento, ricas en nutrientes, tolerantes a la sequía, resistentes a las enfermedades y de maduración temprana aumentarán la productividad del cultivo y, al hacerlo, mejorarán la seguridad alimentaria, reducirán las deficiencias nutricionales y aliviarán la pobreza, especialmente entre pequeños agricultores, las mujeres y los niños.